La lesión del ligamento cruzado anterior (LCA) es una de las lesiones deportivas más frecuentes. Consiste en la ruptura total o parcial de uno de los ligamentos más importantes de la articulación de la rodilla. Este ligamento es responsable de darle estabilidad a la rodilla.
Esta lesión también es conocida como lesión del LCA, ruptura de cruzados, rotura de ligamento cruzado, desgarro de ligamento cruzado anterior, ruptura del LCA.
La lesión del ligamento cruzado anterior se puede producir mientras se realiza cualquier actividad que involucre:
¿Cuáles son los signos y síntomas más frecuentes de este tipo de lesión?
Si usted sufre una lesión del ligamento cruzado anterior es posible que escuche un tronido en la rodilla afectada y presente una sensación de inestabilidad de la rodilla.
Otros signos y síntomas de la lesión del LCA son:
El tratamiento para una lesión del LCA variará dependiendo de las necesidades individuales del paciente. En pacientes jóvenes que son atletas o deportistas de alto rendimiento probablemente necesitarán de cirugía para regresar a su actividad deportiva habitual. Un paciente menos activo y de mayor edad podría volver a su estilo de vida normal sin necesidad de cirugía.
Un LCA roto no se reparará sin una cirugía. Aun así, en algunos casos el tratamiento conservador puede ser eficaz, como en el caso de pacientes de edad avanzada o pacientes con un nivel de actividad muy bajo.
El tratamiento conservador consiste en el uso de un aparato ortopédico en la rodilla para proporcionar estabilidad a la articulación, además de terapia física para ayudar a fortalecer los músculos que rodean la rodilla.
La cirugía de ligamento cruzado anterior (LCA) consiste en la reconstrucción del ligamento cruzado anterior mediante una artroscopía de rodilla, también conocida como cirugía de rodilla o cirugía articular mínimamente invasiva de rodilla.
La cirugía de reconstrucción de ligamento cruzado anterior (LCA) consiste en la colocación de un injerto de LCA por medio de una artroscopía de rodilla, también conocida como cirugía de rodilla o cirugía articular mínimamente invasiva de rodilla.
Durante una artroscopía de rodilla se realizan pequeñas incisiones alrededor de su rodilla, a través de las cuales se introduce una pequeña cámara, llamada artroscopio, que sirve para ver dentro de su rodilla. Por estas mismas incisiones también se introducen pequeños instrumentos quirúrgicos para limpiar y preparar la articulación, para posteriormente realizar la colocación de un injerto de LCA, que reemplazará al ligamento lesionado.
Los injertos de LCA se pueden obtener de varios sitios:
Una artroscopía de rodilla tiene una duración de 1 a 2 horas, esto dependiendo de si existen lesiones asociadas que también requieren de reparación, como son la ruptura/desgarro de meniscos.
Los beneficios de la artroscopía incluyen menos dolor después de la cirugía, menos tiempo de internamiento en el hospital y tiempo de recuperación más rápido.
El costo de una cirugía de ligamento cruzado anterior (LCA) dependerá del tipo de lesión, de su nivel de actividad física y de si existen lesiones asociadas que también requieren de reparación.
Consulte con su traumatólogo si usted cree tener una lesión de ligamento cruzado anterior y así valorar cual es la mejor opción de tratamiento para su caso.
Sin importar si su tratamiento requiere o no de cirugía, la rehabilitación juega un papel vital en volver a sus actividades diarias. Un programa de fisioterapia le ayudará a recuperar la fuerza y la movilidad de la rodilla afectada.
Debido a que esta recuperación toma tiempo, pueden pasar 6 meses o más antes de que un atleta pueda volver a su actividad deportiva habitual después de haberse sometido a una cirugía de ligamento cruzado anterior.
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